Como puedo ver , o ver de nuevo como en este caso, una peli, es en varios días cuando tengo un rato para tomar mate sola. Sigo insistiendo con lo que podría ser material de estudio, y que después del seminario de clown puedo disfrutar y al mismo tiempo aprender, recordar algunas de las explicaciones de Andrés: el clown a todo se anima, después no importa como hace, acá lo demuestran estos dos grandes, Chaplin y Buster Keaton en una escena de Limelight, se animan a ser músicos, concentran el interés del público y finalmente el remate. Me pareció muy hermoso y muy interesante. De la película, a mi gusto excesivamente melodramática, ésta escena es imperdible. Es una pena que no se pueda mantener la atención en todo momento, animándome a una crítica a Chaplin, hay escenas que me parecieron no solo innecesarias, sino largas, densas, donde tuve que avanzar la película porque no las soportaba. Creo que ésta no es comparable a la etapa del cine mudo, pero tiene algunos momentos como éste, maravillosos, y también algunas escenas conmovedoras. Hay que observar casi continuamente la sonrisa y la mirada de Chaplin, a pesar de la edad que tenía en esta película, siguen siendo las mismas que en todas las de su período de juventud. El clown, sin máscara...siempre el mismo...
J siempre me dice que la mirada se mantiene siempre igual a lo largo de la vida, puede ser...
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