Dos entradas sin fotos habrá hoy. El viernes a la noche una moto atropelló una perrita en la 9 de julio, por suerte no quedó en riesgo pero supongo que está fracturada su patita. Quedó en el sector del pasto toda la noche, J le llevó agua, y comprobó asi que tenía chances de salvarse ya que no estaba muy lastimada. Pasan infinidad de personas a diario por ahi paseando a sus perros, nadie se acercó a darle una mano, a ver como estaba. Lamentablemente para mi, en éste momento no puedo traerla acá por falta de espacio, pero esa misma noche, tratamos de comunicarnos con distintos lugares que se dedican al proteccionismo y a la defensa de los derechos del animal, y nada... solo contestadores, y en ADDA el contestador decía que busquemos en la guía telefónica los veterinarios que atienden las 24hs y llevemos al animalito en problemas. No hay ninguna entidad pública que atienda emergencias de animales, no hay urgencias veterinarias que pasen a buscarlos y sepan como moverlos en caso de heridas y fracturas, cosa que nosotros, que no tenemos perros ni gatos, desconocemos. Va a ser un largo tema.
Hace unos años , al asumir el jefe de gobierno actual, se suspendió la obra del hospital veterinario público en Barracas, ya muy avanzada, que hubiese sido una solución para éste y tantos otros casos, y también una fuente de trabajo para tantos veterinarios que no tienen posibilidad de poner su propia clínica privada. Evidentemente hay otras prioridades. El abandono de los animales en las calles y su consecuente condena a vivir en una ciudad salvaje y agresiva, donde vive gran cantidad de gente a la que no le importa nada de nadie no es importante, la conciencia de que un animal es un ser vivo que sufre y siente como cualquiera de nosotros no existe, la ignorancia es cada vez mayor.
Segunda parte de la historia: a la mañana le preparamos arroz y le llevé la comida y más agua. Al rato apareció una mujer paseando a sus dos perros, se escandalizó de que el animalito hubiera pasado la noche ahi, confieso que al principio creí que eran macanas, y que eran palabras. No hice más que subir, y la volví a ver desde la ventana, ya había vuelto a su casa a dejar los perros y estaba tratando de atrapar a la perrita para llevarla. Bajé corriendo a contactarme con ella y ofrecerle ayuda. Le pedí a J que bajara con un trapo ya que ella que evidentemente estaba muy práctica en el trato de animales, necesitaba alguna manta o algo parecido para poder atraparla. Lo logró, prometió ir al veterinario. Dejó sus datos. A la noche cuando volví
la busqué en el facebook, y ahi contaba que la perrita estaba medicada con calmantes y que tendrían que operarle la pata, y que mientras tanto estaba con ella pero solicitaba alguien que la pudiera tener. Yo me siento bastante mal con el tema de no poder hacerme cargo en este momento, me gustaría tener el espacio suficiente para incorporar a la perrita a mi vida, siento que fue fantástico que esa mujer apareciera ayer, pero también que fue una oportunidad para mi que una vez más tuve que dejar pasar.
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